Me encantan los monstruos desde que recuerdo. Mi favorito fue Drácula por mucho tiempo, y sigue siendo uno de los que más amo hasta el día de hoy. Cuando empecé con esta serie de artículos y pensé en el Conde, me di cuenta de muchas cosas que venía haciendo, ideas que tenía en la cabeza, muchas de las cuales me funcionaron antes. Algunas siguen haciéndolo, siendo honesto. Me di cuenta de que había convertido en Drácula con respecto a mi depresión.
I've loved monsters for as long as I can remember. My favorite was Dracula for a long time, and he remains one of the ones I love the most to this day. When I started this series of articles and thought about the Count, I realized many things that I had been doing, ideas that I had in my head, many of which had worked for me before. Some still do, to be honest. I realized that I had become Dracula regarding my depression.
Publicado originalmente en I am 1 in 4. Ligeramente editado.
Originally published in I am 1 in 4. Slightly edited.
¡Un saludo y un abrazo!
Greetings and hugs!
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| "Un día pensé que no podía seguir jugando limpio. La depresión nunca lo hizo, de todos modos". Fuente. |
Érase una vez un niño cuya mente se lo estaba comiendo vivo. Un chico cuyos sentimientos lo agotaban y se alimentaban de él noche tras noche. Ese chico hizo lo mejor que pudo para lidiar con su condición. Tenía días buenos, días malos, y días sacados directamente del infierno, pero al menos siempre encontraba la manera de respirar un poco.
Toma mucho tiempo deshacerse de la depresión. Pero no puedo pensar en una mejor manera de lidiar con ello que siendo el que tiene el control, forzándola a que funcione para ti. Un día, un dulce día, el sol brillaba, el cielo estaba despejado, y el ahora casi adulto encontró su propio juego de colmillos, más afilados que cuchillos. Mordió cada vez que ese pequeño pedazo de basura quizo molestarlo como solía hacerlo hace años.
Harto de ser la víctima
Para ser franco, estoy harto de pensar que la depresión define mi vida, mis sentimientos, mis pensamientos y acciones e incluso la forma en que veo el mundo. Estoy cansado de leer tantas veces la misma vieja historia donde la depresión se ve como algo debilitante. Sí, te agota. Te deja casi sin vida sobre el frío suelo, y por mucho que lo intentes, al día siguiente podría ser igual. Pero me di cuenta de que estoy cansado de estar atrapado allí.
Estoy harto de sentirme roto, como si tuviera el cofre vacío, un yo incompleto. Estoy harto de sentirme herido, bajo, enterrado a seis pies bajo mis propios demonios donde ningún grito de ayuda llegará al mundo exterior. He estado encontrando mi manera de cambiar eso durante estos últimos años. Estoy harto de ser la víctima, tan claro como eso.
Encontrar tu propio camino nunca es fácil. Todos somos muy conscientes de eso, supongo. Pero un día pensé que no podía seguir jugando limpio. La depresión nunca lo hizo, de todos modos. Desde ese día, comencé a jugar sucio. Empecé a mentir y a usar mi depresión como quería. Esta enfermedad me ha hecho lo mismo durante años, así que era hora de cambiar las tornas.
Bebiendo cada gota
Los estudios han descubierto que la depresión te ayuda a ser más creativo, tener más ideas y crear más arte que en tu estado de ánimo promedio. Ignoro los detalles, pero sé que es la verdad. Esa es la forma en que he estado usando mi depresión durante un par de años hasta ahora. Es una herramienta para que mi mente cree. Imaginar y representar mis sentimientos de cualquier manera con la que me sienta cómodo.
Mientras beba hasta la última gota de su sangre, tal como lo hizo Drácula en su propio caso, mientras yo sea ahora la sanguijuela, el chupasangre y ese pequeño demonio quede como víctima, no hay nada de qué preocuparse, sino todo lo contrario. No hay suficientes monstruos. Celebro este giro de la trama, escribiendo, cantando, dibujando, coloreando e incluso jugando con Photoshop cuando me empieza a doler el corazón. No hay vergüenza, ya no.
No hay suficientes monstruos
Sabemos que la depresión toma mucho tiempo para deshacerse de ella. Pero no puedo pensar en una mejor manera de lidiar con ello que ser el que tiene el control, obligándola a trabajar para ti y pagar cada lágrima y pesadilla por la que te hizo pasar. Porque es un monstruo, un monstruo y medio. Pero es mucho mejor saber que al final todo estará bien. Porque no hay suficientes monstruos en el mundo.
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| "One day I thought that I couldn’t keep playing fair. Depression never did, anyway". Source. |
Once upon a time, there was a boy whose mind was eating him alive. A guy whose feelings were draining him and feeding upon him night by night. That boy did the best he could to deal with his condition. He had good days, bad days, and days taken directly from hell, but at least he could always find a way to breathe a little.
It takes a long time to get rid of depression. But I can't think of a better way to deal with it than being the one in control, forcing it to work for you One day, one sweet day, the sun was shining, the sky was clear, and the now almost adult guy found his own set of fangs, sharper than knives. He bit back every single time that little piece of trash wanted to bother him as it used to years ago.
Done Being the Victim
To be blunt, I’m sick of thinking depression defines my life, my feelings, my thoughts and actions and even the way I see the world. I’m tired of reading so many times the same old story where depression is seen a weakening thing. Yes, it drains you. It leaves you almost lifeless on the cold ground, and it doesn’t matter how much you try, the next day could be the same. But I realized I’m tired of being trapped in there.
I am sick of feeling broken, as if I had an empty chest, an incomplete self. I’m sick of feeling hurt, low, buried six feet under my own demons where no cry for help will ever make it to the outside world. I have been finding my way to change that during these last few years. I’m done being the victim, as plain as that.
Finding your own way is never easy. We are all very aware of that I suppose. But one day I thought that I couldn’t keep playing fair. Depression never did, anyway. Since that day, I started playing dirty. I started lying and using my depression the way I wanted to. This sickness has done the same with me for years, so it was time for the tables to turn.
Drinking Every Drop
Studies have discovered that depression helps you be more creative, have more ideas and create more art than in your average mood. I ignore the details, but I do know it’s the truth. That’s the way I’ve been using my depression for a couple of years until now. It’s a tool for my mind to create. To imagine and picture my feelings in any way I feel comfortable with.
As long as I drink every drop of its blood, just like Dracula did in his own case, as long as I am now the leech, the blood-sucker and that little demon remains as the victim, there’s nothing to worry about, but the total opposite. There are not enough monsters. I celebrate this plot twist, writing, singing, drawing, colouring and even playing with Photoshop when my heart starts to ache. There’s no shame, not any more.
Not Enough Monsters
We know depression takes a long while to get rid of. But I cannot think of a better way to deal with it than being the one in control, forcing it to work for you and repay every tear and nightmare it made you go through. For it’s a monster, a monster and a half. But it’s far better to know that in the end everything will be alright. Because there are not enough monsters in the world.
¡Un saludo y un abrazo!
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